Una lectura gay del Apocalipsis (II)
Los siete sellos (Ap 4,1-8,1) 1. Introducción Después de las cartas a las siete iglesias, el Apocalipsis nos lleva directamente al cielo, concretamente ante el Trono de Dios. Allí nos relata como Jesús, el León, el Cordero degollado, es el único ser digno de poder abrir el Libro sellado que Dios sostiene en su mano derecha. Y puede hacerlo no por su fuerza o poder, sino por su debilidad y entrega, por su sacrificio que le llevó hasta la muerte en la cruz. El Libro no contiene leyes o profecías, sino el sentido de la historia, que sólo Jesús puede llevar a la consumación. Al abrir cada uno de los siete sellos, el Cordero permite que la historia se despliegue y podamos ver los males que esconde. Los cuatro primeros nos desvelan, mediante cuatro caballos/jinetes, cual es la situación real de la historia. Los Vivientes llamaban al Cordero para que por fin hiciera su aparición en el mundo, pero no fue él quien llegó, sino los cuatro caballos con jinetes que traen destr