Acabar con la intolerancia
La lucha por los derechos de las personas lgtbi en la sociedad occidental parece que se decanta a favor de la inclusión. A pesar de eso no deberíamos cantar victoria antes de tiempo, ya que quienes se oponen no lo van a poner fácil y harán todo lo que esté en su mano para imponer sus absurdos prejuicios. Sin embargo todo parece indicar que poco a poco la homofobia, al menos la más evidente y descarada, va siendo arrinconada en lugares marginales, y que quienes detentan puestos de poder, por convicción o intereses más o menos evidentes, han decidido enarbolar la bandera de la diversidad. Son los grupos religiosos más fundamentalistas, las instituciones más conservadoras, o las personas más rígidas, quienes a día de hoy muestran un mayor índice de intolerancia hacia la diferencia, y sobre todo, a que esa diferencia pueda ser protegida por la ley, o querida por el mismo Dios. Dicha intolerancia, como cualquier otra, sólo tiene razón de ser cuando alguien se siente atacado o ve pe